Siendo la Fe el Don (regalo) esencial y necesario para entender, acoger y vivir junto con Dios nuestra vida, experimentamos tantas veces que «no nos alcanza», debido a nuestra forma de ser (cualidades y defectos), aciertos y errores, pecados y vicios. Todo esto entra en el menú de la vida; por ello Dios pensó completar su acción y darnos las herramientas necesarias: las virtudes teologales. La Fe nos marca el camino; la esperanza -confianza- nos sostiene en este camino. Veamos cómo.