Por Cynthia Fabila / Desde la fe
Las emociones negativas pueden aumentar y afectar a los adultos mayores en este periodo de aislamiento social por la pandemia de COVID-19.
«Este periodo es particularmente difícil para los mayores de 65 años pues el confinamiento, la falta de actividad, la soledad, entre otros factores, pueden alterar su comportamiento y salud emocional», señala la doctora María de Jesús Jiménez, especialista en Ciencias de la Enfermería y quien se ha especializado en adultos mayores.
“Es importante que la familia esté al pendiente de ellos y que les ayuden a liberar emociones, ya sean negativas o positivas, pues la represión de las mismas puede generar un detrimento de su salud física y espiritual”, expresa la especialista.
La oración, también es una buena estrategia para liberar emociones. “Los abuelos tienen una gran capacidad para comprender las situaciones más difíciles, y cuando ellos rezan por esta situaciones, su oración es más fuerte y poderosa”, dijo el Papa Francisco.
Este es un material, de Cáritas Arquidiócesis para reflexionar de manera personal y familiar sobre la manera en que prestamos nuestro servicio. Para la reflexión y el diálogo
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